La recaudación tributaria por las retenciones cayó un 64,6 % en marzo de este año en comparación con 2022. La merma se debe a un menor volumen exportado y a precios más bajos.

De esta manera, la recaudación por derechos de exportación bajó, pero la recaudación total del Estado fue de 2,3 billones de pesos. La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) destacó que este monto representa un aumento del 88,3 % respecto al mismo mes de 2022.

Al mismo tiempo, destacó que los principales tributos vinculados al mercado interno y al empleo tuvieron variaciones interanuales por encima del promedio. En el comercio exterior sucedió lo contrario.

“Los impuestos vinculados a la producción nacional de bienes y servicios destinados al mercado interno y los vinculados al empleo formal crecen por arriba de la variación de precios del período. Este dato permite presumir que la actividad económica dirigida a la absorción doméstica se mantiene con buena performance”, afirmó la AFIP.

Los impuestos que registraron una variación superior al promedio fueron: Bienes Personales (166,83%), Internos Coparticipados (147,94%), Créditos y Débitos en Cta. Cte. (122,14%), IVA (120,56%), Sistema Seguridad Social (113,03%), Otros coparticipados (101,12%) y Ganancias (93,65%).

Sin embargo, la economía enfrenta una restricción externa y sequía. Por este motivo, marzo, al igual que en febrero, los tributos asociados al comercio exterior registraron una caída por debajo del promedio.

Los ingresos por derechos de exportación disminuyeron un 64,6% frente a marzo de 2022 debido a menores volúmenes declarados en las Declaraciones Juradas de Venta al Exterior (DJVE) correspondientes principalmente a pellets y aceite de soja por efecto de la sequía. También se suma la disminución de los precios promedio de los productos de los complejos sojero y cerealero.

El informe de la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y Centro Exportador de Cereales (CEC) destacó que en marzo el sector liquidó U$S 1.228.6 millones de dólares. Este valor representa el segundo mes de marzo más bajo desde 2020, aunque un 90 % mayor que en el mes de febrero de 2023.

“El ingreso de divisas del mes de marzo es el reflejo de un mercado fuertemente afectado por la extrema sequía que ha reducido drásticamente las producciones, y que ha llevado a los puertos y plantas de molienda a operar con niveles extremadamente altos de capacidad ociosa (los más altos de la historia)”, destacó CIARA.

Al mismo tiempo, el sector exportador aclaró que las comparaciones estadísticas entre distintos períodos son generalmente imprecisas o inexactas ya que la liquidación de divisas está fuertemente influida por el ciclo comercial de los granos, que depende de diversos factores y cambiantes.