El mundo transita por estos días por una doble vía: por un lado, un mayor consumo y crecimiento de la demanda y del comercio mundial de commodities; por el otro, cierta indefinición, por cuestiones climáticas, de la oferta exportable por parte de los principales países productores de soja y de maíz de Sudamérica.

A esto último se suma la incertidumbre sobre cómo será la intención de siembra de cultivos estivales en Estados Unidos para la campaña 2021/22.

En lo que respecta al trigo, el hemisferio norte está en pleno invierno y con fuerte incidencia de nevadas, tanto en Estados Unidos como en los países del Mar Negro. A la par, la falta de lluvias en algunos países productores de la Unión Europea está dificultando la siembra del cereal.

Por lo pronto, la producción mundial de trigo se proyecta en un récord de 774,44 millones de toneladas. Pero el consumo doméstico total también se estima en un máximo de 769,32 millones de toneladas. El resultado es que también se espera en 2021 el mayor volumen de comercialización de trigo de la historia: 194,84 millones de toneladas.

Los principales exportadores de trigo se listan de la siguiente forma: Rusia (39 millones de toneladas), la Unión Europea (27 millones), Estados Unidos (26,81 millones), Canadá (26,5 millones), Australia (20 millones), Ucrania (17,5 millones) y Argentina (11,5 millones).

Por el lado del consumo, China se destaca como el mayor consumidor global, con un volumen de 140 millones de toneladas. Esta cifra representa un fuerte crecimiento con respecto a las 126 millones de toneladas de 2020

El gigante asiático sorprende también con el trigo; se espera que este año importe 10 millones de toneladas, el doble de las cinco millones del ejercicio pasado.

Explota

En cuanto al maíz, es otra producción con pronóstico récord de producción, con 1.134 millones de toneladas, y de consumo, 1.150 millones. Así, por tercer año consecutivo, la demanda supera a la oferta.

En este grano, la lista de principales exportadores es encabezada por Estados Unidos (66 millones de toneladas), seguido por Brasil (39 millones), Argentina (34 millones) y Ucrania (24 millones).

Argentina resalta al consolidarse en el podio como tercer exportador mundial y se consolida como un proveedor confiable y de alta calidad.

Aquí también la principal sorpresa en el comercio mundial ha sido la irrupción de China como mayor importador, al pasar de 7,6 millones compradas en 2020 a 24 millones estimadas para 2021; es decir, un incremento del 216 por ciento.

De esta manera, sobrepasó por varios millones de ventaja a varios importadores históricos del cereal, como los países del sudeste asiático (18 millones), México (16,5 millones), Japón (15,6 millones), Corea del Sur (11,5 millones) y Egipto (10,3 millones).

La soja también

Por último, el panorama para la soja es igual que para los otros dos granos. El 2021 también tendrá el mayor volumen de producción de la historia, con 361,08 millones de toneladas; pero el consumo global alcanzará el súper récord de 369,84 millones de toneladas. En la oleaginosa, es el segundo año en que la demanda supera a la oferta.

Y otra vez China aparece a la cabeza del ranking importador, con 100 millones de toneladas, 18 millones más que en la campaña pasada. La nación más poblada del mundo es la mayor procesadora de la oleaginosa, con una molienda proyectada para este año de 99 millones de toneladas y un volumen de consumo interno de 117,7 millones.

Si se observa la influencia que tiene China en el comercio mundial de los tres principales productos de exportación de la Argentina, no hay dudas de que los próximos pasos que dé como comprador tendrán influencia directa sobre la tendencia de los precios futuros para el ciclo 2021/22, así como la tuvo durante los últimos meses.

Fuente: AgroVoz