En un auditorio colmado de jóvenes del sector agropecuario y con la presencia de dirigentes de Coninagro, esta gremial del campo celebró el 8º Congreso Internacional con la tradicional conjunción del campo y la política.
En ese marco, Lucas Magnano, presidente de la entidad, se encargó de responderle al representante presente del gobierno nacional: Guillermo Francos, Jefe de Gabinete de Ministros de la Nación. Resultados de búsqueda. Le expresó que disentir en política no es una declaración de guerra. Asimismo. Invitó a todos los actores del campo argentino a generar espacios de diálogo y consensos que permitan el desarrollo de las cadenas productivas.
“Debemos ponernos de acuerdo por el bien de todos. No podemos tapar el sol con las manos y reconocer que no estamos pudiendo satisfacer las demandas de nuestros productores”, expresó Magnano aclarando que seguirán insistiendo en la virtud de los consensos y acuerdos.
A su tiempo, el dirigente expresó que no es una buena señal el resultado de una elección que dejó mucho por analizar. “Hubo un claro ganador que fue el desinterés. Acá no ganó ni perdió nadie”, enfatizó el dirigente.
Molesto por el momento económico y político, Magnano volvió a repetir que el sector agropecuario aporta 6 de cada 10 dólares al país, pero carece de infraestructura para aumentar la producción.
Después de escuchar atentamente la enumeración de logros que detallo lo el ministro Francos, referenciados al aumento de producción, exportaciones y ventas el los primeros meses de la gestión de la administración de presidente Javier Milei, resumidos en exportaciones que crecieron un 4.5 % en volumen, financiamiento a la maquinaria agrícola por 750 mil millones de pesos y un incremento de 6,2 % en la producción de trigo, Magnano reclamó por una mayor acción educativa en todos los niveles para formar mejores profesiones a futuro.