Volaron los precios del aceite de soja en Chicago ante la posibilidad de un cambio disruptivo en el mercado global

Los futuros de aceite de soja en el mercado estadounidense CME Group (“Chicago”) registraron alzas enormes este lunes ante la posibilidad de un cambio disruptivo en la matriz comercial global del biodiésel.

El contrato Aceite de Soja Julio 2024 CME terminó este lunes en 1010,4 u$s/tonelada con una suba intradiaria de 45,4 u$s/tonelada, mientras que la posición Diciembre 2024 finalizó en 1008,6 u$s/tonelada con un alza de 43,2 u$s/tonelada.

Ese empuje permitió que los futuros de poroto soja terminaran también con alzas a pesar del descenso del valor de los contratos de harina de soja en Chicago.

La razón detrás del tal fenómeno es que sería inminente la imposición de un bloqueo comercial del biodiésel chino en el mercado de la Unión Europea, lo que dejaría la “puerta libre” a EE.UU. como proveedor privilegiado de ese recurso.

En los últimos años China logró colonizar el mercado europeo de biodiésel, pero –ante el pedido realizado por la industria de biocombustibles de la UE-27– las autoridades comunitarias comenzaron a investigar posibles prácticas fraudulentas por parte de la nación asiática.

La producción china de biodiésel hidrotratado o HVO (Hydrotreated Vegetable Oil) se multiplicó en los últimos años junto con las exportaciones del biocombustible gracias al uso de fuentes supuestamente “renovables” según los criterios establecidos por la UE-27.

Si bien los chinos declaran que el HVO exportado a Europa se fabrica con aceite de cocina usado, se sospecha que la mayor parte del mismo está elaborado con aceite de palma importado desde el sudeste asiático.

En ese marco, luego de una investigación que se inició el año pasado, en el presente mes de julio las autoridades de la UE-27 comunicarán los resultados de la misma y se prevé que eso establecerá el fundamento para implementar aranceles anti-dumping que terminen bloqueando el ingreso del biocombustible chino al mercado europeo.

Para EE.UU. esa oportunidad representa un aliciente sustancial, especialmente si se tiene en cuenta que la capacidad interna de procesamiento de soja sigue creciendo en línea con la necesidad de abastecer a la pujante industria de biodiésel convencional e hidrotratado.

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